Campari

CAMPARI

Cuando hablamos de Campari se nos viene a la cabeza el aroma de este licor amargo de color rojo intenso. Seguramente uno de los bitter más conocidos en las barras de los bares.

La historia nos remonta a mediados del siglo XIX a Milán (Italia). Ahí Gaspare Campari, hijo de campesinos, se dedicó desde los 14 años a trabajar en bares como camarero. Al poco tiempo abrió su propio bar y años más tarde un segundo bar en pleno centro de Milán. Era en los sótanos de estos locales donde creaba sus propios siropes y por supuesto, donde creó su Bitter más famoso: Campari.

La receta original de Campari es secreta y se rumorea que contiene unos 60 ingredientes aromáticos, distribuidos entre hierbas, especias y frutas, principalmente frutas cítricas. Cuenta la leyenda que solo tres personas conocen esta receta y esas personas son a su vez desconocidos para  una mayor seguridad.

Estos ingredientes secretos se maceran en alcohol neutro de alta graduación de manera individual, es decir ingrediente por ingrediente. Posteriormente se mezclan estos caldos y se rectifica con azúcar liquida y con un punto de color.

Es de color rojo vivo e intenso, pero no denso.

Aromas mezclando las notas de cítrico naranja con notas de genciana terrosa. En segundo plano aparecen notas herbales y matices de especias dulces.

Al pasarlo a boca se aprecia la intensidad de sabor bien equilibrado entre dulce y amargo. Los matices especiados de genciana y raíz de Angélica predominan sobre los cítricos y aparecen matices dulces avainillados y ligeramente afrutados.

Final amargo y especiado aunque con recuerdos dulces, ligeramente afrutados.